El ransomware (malware que cifra los archivos de un equipo y los «secuestra» a cambio de un rescate) es uno de los mayores problemas de seguridad al que se enfrentan tanto usuarios como empresas de todo el mundo. Cualquiera puede estar expuesto a estas amenazas. Prueba de ello es que sus distintas variantes y familias aumentan constantemente. En territorio español han aumentado un 42% en 2017 respecto al año anterior. En 2017 se registraron 324 variantes, frente a las 228 que se detectaron en 2016. Estas son cifras que ha sacado a la luz la firma de seguridad ESET, que ha analizado en un estudio el impacto del ransomware durante 2017.
Uno de los aspectos investigados ha sido poner sobre la mesa cuál ha sido la familia de ransomware que más han detectado sus sistemas. Y el claro ganador ha sido TorrenLocker. Un 50,4% de todo el ransomware detectado durante 2017 pertenecía a esta variante concreta del malware, siendo prácticamente una de cada dos ransomware de esta familia.
TeslaCrypt, CryptoWall, Crysis, Cerber o Locky son las variantes de malware más populares, por detrás de la clara «ganadora», como se puede ver en el gráfico proporcionado por la compañía.
“El impacto que una amenaza tan peligrosa como el ransomware ha tenido en España durante el pasado año demuestra que nuestro país tiene margen de mejora en lo que respecta a la implantación de medidas de seguridad”, afirma Josep Albors, responsable de Investigación y Concienciación de ESET España.
Asimismo, Albors insiste en que los usuarios no deben «bajar la guardia ante el descenso con respecto a años anteriores», ya que se trata de una amenaza que «sigue estando muy presente y puede causarnos graves problemas”.