El marketing no es una ciencia exacta. Y menos aún el marketing digital. La cantidad de herramientas y canales de comunicación que nos brindan los medios digitales y las nuevas tecnologías es ingente. Estas además evolucionan a una gran velocidad y es complicado saber cuáles serán las más adecuadas para nuestro negocio o metas en un futuro, incluso cercano.
Adaptarnos a las nuevas realidades de nuestros usuarios o clientes es crucial, así como observar su comportamiento online para ofrecerles experiencias lo más personalizadas posible. Saber cómo llegar de la forma más efectiva y eficiente no siempre es fácil, pero las tendencias que apuntan fuerte en el terreno del marketing digital nos pueden dar una pista.
1. Automatización, pero personalizada
Como decíamos, es importante observar las necesidades de nuestro público, y sus intereses. Para bien y para mal, en internet podemos acceder a mucha información, y eso puede ser contraproducente a la hora de llegar a los usuarios, que están sobrecargados de datos. Los contenidos deben ser relevantes para ellos; les tiene que aportar algo nuevo. Es interesante realizar el ejercicio de ponerse en el lugar del cliente para llegar hasta él a través de los canales adecuados, y en el mejor momento. Existen numerosas herramientas de análisis que nos pueden ayudar en nuestra tarea, y el big data es nuestro gran aliado. El inboud marketing por ejemplo, puede ayudarnos en la tarea de automatizar contenidos e interacción con el cliente, pero sin perder personalización.
2. El contenido es el rey
Sabemos que un buen contenido atrae mucho más que un anuncio convencional. El marketing de contenidos o content marketing funciona de maravilla para posicionar una marca o servicio en la mente del consumidor como referente en ciertos temas. De nuevo, ponerse en el lugar del usuario es importante: ¿qué le gustaría leer? ¿qué información necesita o le podría ser útil? Aquí, el autobombo no está permitido. Ofrecer un contenido de calidad en el marco adecuado será apreciado por los usuarios. La recompensa, vendrá después.
3. Cuéntalo en imágenes
La mayor parte del contenido que se comparte en internet y en las redes sociales es audiovisual. Las imágenes y sobre todo los vídeos llegan de forma más directa y cercana a los usuarios. Existen tantos formatos como alcance nuestra imaginación, desde píldoras con consejos sobre el tema en el que seamos expertos hasta entrevistas o casos de éxito de nuestros clientes. Depende de nuestro objetivo, elegiremos el formato que más se adapte a nuestras metas.
Piensa también en el formato móvil. Según We are Social, los usuarios de smartphones de entre 18 y 24 años consumen 71 minutos por semana de contenidos audiovisuales a través del móvil.
4. Anuncios nativos
Muchos usuarios sienten cierto rechazo hacia la publicidad más «tradicional», y los banners en páginas web en ocasiones son eliminados por los bloqueadores e publicidad, por lo que pierden eficacia. Sin embargo, bien elegidos y en el lugar correcto, pueden seguir generando visibilidad. Es importante que los anuncios no sean invasivos, sino que estén de forma nativa embebidos en el contenido y que sea más natural para el lector. Qué se cuenta importa, y cómo, también.
5. Profesionales influyentes, más que influencers
Las redes sociales son una herramienta valiosa para el marketing digital. Nos permite llegar a una gran cantidad de personas de forma rápida e interactuar con ellos, obteniendo respuestas de sus impresiones y feedback también de forma directa. Para llegar a un público concreto, los denominados influencers están de moda. Pero cuidado, por tener muchos seguidores en internet no significa que vaya a ayudarnos en nuestra estrategia contar con ellos. Sin duda es un buen método para conectar con nuestros usuarios deseados, pero para ello hay que elegir bien a nuestro «influenciador». Sobre todo en función de nuestro mercado. Hay que pensar que esa persona (y lo que representa) se asociará con nuestra marca. Por lo que es importante elegir profesionales que tengan influencia en nuestro ámbito y contactos entre los clientes a los que queremos llegar, centrándose en la calidad más que en la cantidad