Desarrolladores de iOS aseguran que la App Store registra datos personales de los usuarios y los guarda, lo que permite la identificación de los usuarios y su actividad. Con ello, Apple estaría violando sus propios términos de privacidad.
Recientemente nos hacíamos eco de la demanda colectiva que un grupo de usuarios iba a presentar contra Apple por recopilar datos del uso de sus aplicaciones sin el consentimiento de los usuarios.
Aunque hasta ahora la compañía había negado estas prácticas, una nueva investigación ha ratificado lo que los investigadores de ciberseguridad de Mysk ya apuntaban. Dos desarrolladores de iOS han confirmado que la App Store registra y guarda los datos personales de los usuarios.
Unos datos con los que la compañía puede identificarlos y conocer el uso que hacen de las apps, violando los términos de privacidad de Apple.
Si bien la compañía insiste en que los datos recopilados no permiten identificar personalmente a los usuarios, los expertos de Mysk apuntan que no es así. Según han hecho público en Twitter, los expertos explican que los datos que recibe Apple incluyen un ID denominado ‘DSID’, el identificador de servicios de directorio.
De esta forma, la compañía recopila este ID junto con la información del ID de Apple, lo que confirma que el DSID está asociado con datos como el nombre de usuario, número de teléfono, fecha de nacimiento, y la dirección de correo electrónico, entre otros.
Con ello, la compañía puede hacer un seguimiento detallado del comportamiento de los usuarios mientras hacen uso de las aplicaciones de navegación en la App Store ya que disponen de la identificación necesaria para vincular los datos de los usuarios.
Las pruebas ponen a Apple contra las cuerdas
Sin duda, se trata de una práctica contraria a la política de análisis de la firma de Cupertino. Según ésta, «los datos personales no se registran, están sujetos a técnicas de preservación de la privacidad, como la privacidad diferencial, o se eliminan de los informes antes de que se envíen a Apple».
Pero los hallazgos de los investigadores de Mysk demuestran que no se está siguiendo esta política.
Con ello empeoran los problemas para Apple después de que estos expertos en ciberseguridad ya alertaran a principios de este mes que la compañía estaba recopilando información de los usuarios sin su consentimiento.
Y es que, pese a que los usuarios desactivaran la opción ‘Compartir análisis de iPhone’ de sus dispositivos. Tras conocerse estas prácticas, un grupo de usuarios presentó una demanda colectiva contra Apple. Ahora, este avance en las investigaciones pone las cosas más difíciles para Apple a la hora de defender sus prácticas de análisis.