Finalmente, Telegram no será suspendida en España. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha dejado sin efecto y, al parecer, de forma definitiva la orden de bloqueo cautelar de la popular plataforma de mensajería.
Tras 24 horas de auténtico escándalo, ya no solo por parte de los usuarios de Telegram sino de los más críticos ante lo que consideraban un ataque directo a la privacidad y a la libertad de expresión, Pedraz ha reculado constatando que la medida era «excesiva y no proporcional».
Horas de auténtico infarto donde usuarios, medios y empresas que habitualmente utilizan Telegram como uno -o el único- canal de comunicación tanto de forma interna como con sus lectores, ya estaban buscando nuevas formas de proteger la información. Alternativas que, pese a que Telegram siga funcionando con normalidad, no está de más seguir teniendo en cuenta ante posibles cierres de la plataforma.
Proxy y VPN por si Telegram (u otra app) cierra
Las dos mejores opciones son, sin duda, VPN y Proxy que pese a sus similitudes esconden algunas diferencias que es preciso conocer antes de decantarse por una u otra. Ambas comparten un objetivo común: ocultar la información de conexión, proteger la identidad de quienes la usan y poner a salvo el contenido que en ellas se comparte.
Qué es VPN
VPN responde a las siglas de Red Privada Virtual, ésta funciona creando una conexión segura y encriptada, normalmente denominada túnel, entre el usuario e Internet. Esta conexión la establece el cliente VPN que se ejecuta en el dispositivo del usuario y la mantiene el servidor VPN. La naturaleza encriptada de la conexión significa que todo el tráfico de datos que pasa a través de ella está a salvo de la interceptación de terceros. Esto es especialmente útil cuando se está conectado a redes Wi-Fi públicas, donde el riesgo de interceptación de datos es mayor.
Una de las características clave de una VPN es su capacidad para ocultar la dirección IP real del usuario. Cuando te conectas a una VPN, la dirección IP del usuario se sustituye por la dirección IP del servidor VPN. Esto significa que la verdadera ubicación e identidad del usuario quedan ocultas, y sus actividades en línea parecen originarse desde la ubicación del servidor VPN. Como resultado, una VPN proporciona un alto nivel de anonimato y privacidad al usuario, lo que la convierte en una opción popular para quienes se preocupan por el seguimiento y la vigilancia en línea.
Además, una VPN puede utilizarse para acceder a contenidos restringidos geográficamente, haciendo que parezca que el usuario accede a Internet desde la ubicación del servidor VPN. Esto es especialmente útil para acceder a servicios de streaming, sitios web o contenidos que pueden estar limitados a regiones específicas. Al conectarse a un servidor VPN de la región correspondiente, el usuario puede eludir estas restricciones y acceder al contenido deseado, independientemente de su ubicación real.
Qué es Proxy
Por su parte, un servidor proxy actúa como intermediario entre el usuario e internet. Cuando un usuario realiza una solicitud para acceder a un sitio web o a un servicio en línea, esta solicitud se envía primero al servidor proxy, que procesa la solicitud en nombre del usuario y le devuelve los resultados. Este papel de intermediario de un servidor proxy aporta varias ventajas, una de las cuales es la capacidad de proporcionar distintos niveles de anonimato al usuario.
Los servidores proxy también se utilizan habitualmente para eludir las restricciones de la red y acceder a contenidos que pueden estar limitados geográfica u organizativamente. Por ejemplo, en un lugar de trabajo o en un entorno escolar donde determinados sitios web o servicios pueden estar bloqueados, los usuarios pueden utilizar un proxy para acceder al contenido restringido dirigiendo su conexión a través de un servidor situado fuera de la red restringida.
Otro aspecto importante de los servidores proxy es la forma en que gestionan el tráfico web. Los servidores proxy pueden configurarse para almacenar en caché las páginas web, lo que significa que almacenan copias de las páginas web a las que se accede con más frecuencia. Esto puede mejorar el rendimiento y reducir el ancho de banda utilizado, especialmente en un entorno de red compartida.
Cómo funcionan las VPN y Proxy: diferencias
El principio fundamental del funcionamiento de una VPN es el establecimiento de una conexión segura y encriptada, a menudo denominada túnel VPN, entre el dispositivo del usuario y el servidor VPN.
Esta conexión extiende efectivamente la red privada a través de una red pública, como Internet, permitiendo al usuario enviar y recibir datos como si su dispositivo estuviera directamente conectado a la red privada.
Así es como una VPN puede proporcionar un alto nivel de seguridad y privacidad para las actividades en línea del usuario, incluso cuando utiliza redes Wi-Fi públicas no seguras.
Además de cifrar el tráfico de Internet del usuario, una VPN también enmascara su dirección IP, haciendo que parezca que su conexión se origina en la ubicación del servidor VPN. Esto no sólo proporciona cierto grado de anonimato, sino que también permite al usuario eludir las restricciones de geolocalización y acceder a contenidos que pueden estar limitados a determinadas ubicaciones.
Por su parte, el funcionamiento de un servidor proxy gira en torno a la gestión de las solicitudes de red de los usuarios y el posterior reenvío de estas solicitudes a los servidores de destino.
Cuando un usuario realiza una solicitud para acceder a una página web o a un recurso en línea, la solicitud se dirige primero al servidor proxy, que a continuación actúa en nombre del usuario para satisfacer la solicitud. Esto puede implicar varias acciones, como recuperar la información solicitada de una caché, reenviar la solicitud al servidor de destino o devolver al usuario una copia en caché de los datos solicitados.
Una de las funciones clave de un servidor proxy es proporcionar distintos niveles de anonimato al usuario. Al actuar como intermediario, un proxy puede enmascarar la dirección IP del usuario y ocultar eficazmente su verdadera ubicación a los sitios web o servicios a los que accede. Esto puede ser útil para los usuarios que deseen mantener un cierto nivel de anonimato o eludir los métodos de geo-restricción utilizados por determinadas plataformas online.
Además, la capacidad de almacenamiento en caché de los servidores proxy puede suponer mejoras de rendimiento en términos de tiempos de carga de las páginas web y una reducción del uso del ancho de banda de la red.
Esto se debe a que, con la capacidad de almacenar y servir copias en caché de páginas web, un proxy puede aliviar la necesidad de peticiones repetidas a los servidores de destino para el mismo contenido, especialmente en un entorno de red con múltiples usuarios que acceden a los mismos recursos.
Entonces, ¿elijo VPN o proxy?
Llegados a este punto, ¿qué elegir? ¿una VPN o un proxy? Antes es importante evaluar tus requisitos específicos y el nivel de funcionalidad y protección que necesitas para tus actividades on line.
Tanto las VPN como los proxies ofrecen ventajas únicas y se adaptan a diferentes casos de uso, por lo que comprender tus necesidades y prioridades puede ayudarte a tomar una decisión informada sobre qué tecnología es la más adecuada para ti.
Si tus principales preocupaciones giran en torno a la seguridad de los datos, la protección de la privacidad y la transmisión segura de información sensible, es probable que una VPN sea la opción más adecuada.
Las sólidas funciones de encriptación y seguridad que ofrecen las VPN las convierten en la opción ideal para actividades como la banca electrónica, el acceso a recursos de trabajo confidenciales y la comunicación a través de redes no fiables.
Además, si quieres eludir bloqueos geográficos exhaustivos y acceder a una amplia gama de contenidos bloqueados por región, la capacidad de una VPN para enmascarar tu dirección IP y proporcionar un alto nivel de anonimato es una ventaja significativa.
Por otro lado, si tu objetivo principal es acceder a contenidos básicos con restricciones geográficas o eludir filtros de red de forma directa, un proxy puede satisfacer tus necesidades eficazmente.
Los proxies se utilizan a menudo para tareas como acceder a contenidos multimedia bloqueados por región o simplemente para mantener un cierto nivel de anonimato durante la navegación web ocasional.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que, debido a las diferencias en las capacidades de encriptación y seguridad de los datos, los proxies pueden no ser la opción más adecuada para actividades que impliquen la transmisión de información sensible o privada.