El pasado viernes 22 de marzo por la noche conocíamos la noticia de que el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz había ordenado el cierre temporal de forma cautelar en España de la aplicación de mensajería Telegram. La suspensión de este servicio debe ser realizada por parte de las operadoras que prestan servicio en el país.

Una decisión motivada por una denuncia presentada por la Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales (EGEDA) en representación de tres empresas audiovisuales: Mediaset, Atresmedia y Movistar Plus. Éstas habían denunciado a la aplicación por una presunta visualización irregular de contenidos audiovisuales sometidos a derechos de autor.

Según informa Economist & Jurist, dichos contenidos aluden a la visualización de partidos de fútbol de forma ilegal, películas “pirateadas” y series de televisión de pago de Atresmedia premium.

La propia Mediaset fue la primera en adelantar la primicia a través de su canal Cuatro, y Europa Press se hacía eco, informando de que el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 5 había adoptado esta decisión en el marco de una petición de medida cautelar que reclamaron dichas compañías, solicitando que se paralizase la actividad de Telegram mientras se llevaba a cabo la investigación. 

En el momento en el que se publica este artículo (lunes 25 de marzo a primera hora), Telegram sigue funcionando, tanto la versión web como la aplicación. 

Desde el viernes, muchos de los usuarios (y no usuarios) de la aplicación de mensajería han puesto el grito en el cielo. No todo han sido críticas negativas a la decisión, también hay voces que se han postulado de manera neutral o a favor de la decisión. 

Algunos por considerar la aplicación como minoritaria. Sin embargo, si nos atenemos a esta encuesta de la CNMC, el 18% de los internautas en España usan Telegram, lo que equivaldría a unos 8,5 millones de personas. Otros, porque llevan tiempo informando y alertando de las malas prácticas que llevan a cabo algunos usuarios a través de esta aplicación. 

Un argumento muy peligroso, ya que se estaría culpando al medio del uso que hacen algunos delincuentes, obviando la libertad de la mayoría de los usuarios que hacen un uso legítimo. 

El bloqueo de tres días de Telegram en Brasil “no fue proporcional”

Como explicaba en Bit Life media el experto Rafa López el mismo viernes, este tipo de bloqueo “no es nuevo para Telegram ya que sucedió un caso similar en Brasil donde un juez ordenó el bloqueo temporal hasta que la compañía colaborase con las autoridades locales”.  

Telegram fue suspendido en Brasil el miércoles 26 de abril de 2023 porque la plataforma no proporcionó datos completos sobre los canales neonazis que fueron solicitados por la justicia brasileña. El bloqueo duró tres días. Un tribunal de segunda instancia de Brasil anuló el 29 de abril la sentencia. ¿Por qué? El magistrado consideró que la orden de suspensión completa del servicio no es proporcional debido a que afecta ampliamente en todo el territorio nacional la libertad de comunicación de miles de personas absolutamente ajenas a los hechos en investigación,según informa DW.

Se han dado casos de cierres temporales en otras ocasiones. Telegram únicamente está bloqueado de manera indefinida en tres países: China, Irán y Pakistán.

Qué ha pasado desde el viernes: las claves del auto judicial explicadas por los expertos

Las primeras fuentes e informaciones indicaban que el magistrado había solicitado previamente información a la plataforma y que ésta no habría atendido el requerimiento, lo que empujaba al juez a dicha decisión. Pero esto no es así.

Un día más tarde, el sábado, se conocía el auto del juez, que fue rápidamente analizado por expertos en derecho y tecnología. 

En ese mandato se conoce que la medida se adopta ante la falta de colaboración de las Islas Vírgenes, a las que se solicitaron comunicación a Telegram sobre datos acerca de los titulares de cuentas que estaban desarrollando una actividad presuntamente infractora. Es decir, que el juez solicitó información a las Islas Vírgenes y no a Telegram directamente. 

El auto se dirige a Vodafone, Orange, MásMóvil, Digi, Telefónica Movistar, Avatel, Adamo, Aire Networks y Procono, operadoras que deben ejecutar el bloqueo en unas horas.

Ofelia Tejerina, presidenta de la Asociación de Internautas explica en un comunicado que “la medida, especial, debería estar presidida por criterios de necesidad, proporcionalidad e idoneidad”, pero no se cumplen en esta ocasión.

“Idónea no parece, porque Telegram puede impedir que un operador nacional -español- bloquee su servicio, ya que esta aplicación incorpora un servicio de proxy para «fingir» conexión desde otro país. Y si tienes VPN, pues lo mismo”, explica la abogada, añadiendo que “proporcionada tampoco parece porque su ejecución produce un impacto indirecto en el libre ejercicio derechos fundamentales como la libertad de información y la libertad de expresión, pero un clarísimo impacto directo en la libertad de empresa, ya que, por ejemplo, existen muchísimos canales de negocios en Telegram. Por lo tanto, esta situación puede ocasionar un perjuicio económico gravísimo para millones de usuarios, además de a la empresa intervenida”, añade Tejerina.

En cuanto a si es necesaria o no, prefiere que juzguen los propios internautas, pero la clave es que “deben cumplirse todos estos requisitos, resultando inadmisible cualquier medida que no observe alguno, aunque respete todos los demás».

“Estos requisitos deben cumplirse en su totalidad, todos y cada uno”, advierte el abogado Gerard Espuga en LinkedIn,  “el incumplimiento de los requerimientos realizados por el Juzgado no es imputable a Telegram (que no es parte), sino a las autoridades de las Islas Vírgenes (donde está la matriz) que no contestan a la Comisión Rogatoria internacional”.

Y por otro lado, señala que “la argumentación jurídica sobre la necesidad, idoneidad y proporcionalidad, basada en el 13.2 de la LeCrim, es más que escueta”.

Una afirmación que comparte el también abogado Borja Adsuara, argumentando que es una «medida desproporcionada».

Debate abierto sobre libertad de expresión

Este caso ha (re)abierto un importante debate sobre propiedad intelectual y libertad de expresión.

Y es que ha generado una gran preocupación, no solamente entre los usuarios de la aplicación, sino entre los ciudadanos y organizaciones.

Telegram es una aplicación conocida precisamente por su énfasis en la seguridad, que ha aumentado en número de usuarios en los últimos años. Entre otras características, cuenta con cifrado de extremo a extremo y diversas funciones vinculadas a la privacidad, por ejemplo, la posibilidad de crear grupos en los que no es visible para el resto el número de teléfono personal de los participantes, tan solo el nickname elegido.

Son muchos los usuarios, además de expertos en derecho tecnología, ciberseguridad y privacidad, que han hecho saltar las alarmas. Porque de ejecutarse puede ser un grave atentado contra la privacidad y sentar un peligroso precedente.

¿Puedo saltarme la restricción para usar Telegram? Sí, pero cuidado con las estafas

Hay varias maneras. Pero antes de nada: cuidado con los posibles fraudes que se intenten aprovechar de esta situación.

No es algo nuevo, los ciberdelincuentes tratarán de utilizar esta circunstancia como cebo para “colarnos” una aplicación falsa, un archivo malicioso…

Así que a partir de ahora, mucha atención a los cantos de sirena que pueden cobrar forma de supuestas aplicaciones de Telegram que se saltan el bloqueo, VPNs, o enlaces a supuestos proxy que son en realidad URL maliciosas.

Y ahora sí, ¿cómo saltarse la restricción y evitar el bloqueo para poder usar Telegram?

Hay varias maneras. Mediante proxys o una VPN. 

¿Qué es una VPN y un proxy? 

Ambos son servicios intermediarios para conectarnos a internet. Es decir, en vez de conectarnos a un sitio web o a un servicio o aplicación directamente, nos conectamos a través de ese intermediario. Un servidor intermedio que enmascara nuestra IP (nuestro “número de identificación de usuario único” de cara a internet), de manera que el servicio no ve que nos conectamos nosotros, sino la IP de ese servicio intermedio. ¿Por qué se puede saltar la censura? Porque la VPN permite que nos conectemos a un servidor de otro país, por tanto a efectos prácticos es como si nos estuviésemos conectando desde ese país. 

El proxy actúa básicamente de una manera similar. La diferencia entre un proxy una VPN es que cuando activamos una VPN en nuestro dispositivo afecta a todo el tráfico, todas las conexiones pasan por la VPN. Además, todo el tráfico viaja cifrado.

En el caso del proxy, se instala únicamente para un servicio o una aplicación concreta. En este caso, no tiene por qué estar cifrado el tráfico ni la conexión, puede estar en texto claro (no cifrado). Esto implica que el intermediario puede leer este tráfico. Es decir: podrían espiarnos. Un proxy no fiable podría usar esos datos sin nuestro conocimiento.

En el caso de Telegram, hay que elegir una VPN que tenga IPs fuera de España. Generalmente son de pago, aunque también las hay gratuitas o freemium, es decir, con limitación del tráfico total en el modo gratuito.

Desde hace días están circulando por internet proxys para saltarse el bloqueo. 

Desde el canal de Youtube de NASeros muestran cómo instalar estos proxys, explicando además un punto clave en este asunto, que el propio Telegram tiene cifrado punto a punto, siempre que sea una conexión directa al servidor de Telegram. 

Por tanto, al aplicar cualquier cambio, estamos alterando esto. Saber qué proxys aplicar es importante. En este sentido, los proxys MTProto sí van cifrados, aunque no son tan robustos como el propio de Telegram, explican, pero sí tienen una capa de seguridad. 

Telegram tiene su propio canal con estos proxys que tienen ese cifrado Si uno de esos proxys caen, la aplicación se conecta automáticamente al siguiente. Los expertos avisan: el cifrado punto a punto se pierde, por lo tanto hay que estar muy atentos si se va a enviar información confidencial. 

Por otro lado, tanto los proxys como las VPN pueden ralentizar la velocidad de conexión a internet.

¿Cómo podrían ejecutar técnicamente este bloqueo las operadoras?

Desde NASeros dan su opinión: podrían hacerlo, a través de sus DNS, impidiendo que la conexión vaya a los servidores de Telegram, lo “que sería muy sencillo de saltar”. 

También podrían bloquear las IPS de los servidores de Telegram, modificando los BGP, pero podría tener complicaciones importantes.

Por qué Telegram sigue activo en España

Es la pregunta del millón. Los operadores son los que tienen que ejecutar el mandato del juez. Una vez que lo reciban, tienen unas horas para llevarlo a cabo. 

Desde el servicio DownDetector, que recibe notificaciones de los usuarios sobre la disponibilidad de los servicios digitales, la aplicación tanto móvil como web de Telegram ha ido sufriendo caídas a lo largo de los últimos días.

Periodista especializada en seguridad informática y tecnología. Cofundadora y directora editorial de Bit Life Media, web dedicada a la actualidad de la tecnología, ciberseguridad e innovación. Presentadora de eventos y ponente especializada en seguridad informática y concienciación. Autora de "Ciberseguridad, consejos para tener vidas digitales más seguras".

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