Cuando la demanda aumenta, el ingenio de los vendedores se agudiza, aunque se caiga en técnicas de competencia desleal. Esto es lo que está sucediendo en plataformas de ecommerce como Amazon, Shein, Temu o Aliexpress. El brushing es la nueva y peligrosa moda extendida durante los últimos meses consistente en el envío de paquetes no solicitados a personas que no han realizado ninguna compra.
El objetivo de esta práctica no es otra que aumentar el prestigio y las valoraciones de una determinada empresa. Hay que recordar que en estas plataformas participan miles de vendedores, que buscan tener una mayor cantidad y calidad de reseñas. De este modo, el algoritmo colocará sus productos en las primeras posiciones tras una búsqueda.
¿Cómo funciona el brushing?
Para ello, los estafadores crean perfiles falsos en estas plataformas, empleando datos personales obtenidos de manera ilegal y, más tarde, envían productos de bajo valor como bisutería o electrónica barata. Son una clara estafa, aunque aparentemente son transacciones legítimas.
El objetivo de los estafadores que practican el brushing no es otro que inflar las ventas de sus tiendas online gracias a reseñas falsas, que a su vez atraerán a potenciales clientes.
Aunque por el momento se ha extendido especialmente por EEUU, no se descarta que pueda irrumpir en Europa, e incluso, en España.
Los riesgos del brushing
Esta práctica, lejos de ser una simple broma de mal gusto, se constituye como un riesgo para la seguridad personal de las víctimas. Quienes reciben estos paquetes que no han solicitado han sufrido el robo de sus datos personales (nombres, direcciones, números de teléfono e incluso, números de cuenta).
A partir de este preciso instante se produce un robo de identidad y fraudes financieros. De este modo, aumenta la vulnerabilidad de los usuarios en el entorno digital. El brushing se convierte en la puerta de entrada de los ciberdelincuentes, dándoles la capacidad para abrir cuentas bancarias o contratar servicios determinados a nombre de la víctima sin su conocimiento.
No hay que olvidar que si los productos que nos han enviado, sin nuestro consentimiento, son tecnológicos, entonces el riesgo es mayor. Estos dispositivos podrían estar dotados de virus o software espía para robar información confidencial de los dispositivos de las víctimas.
Muchos usuarios han denunciado que sus cuentas han sido suspendidas o restringidas como consecuencia de que se han creado reseñas falsas con su nombre. Esto acabará teniendo un impacto negativo en su reputación como compradores y les perjudicará en futuras acciones. Así pues, podrían perder beneficios de suscripción, recompensas o el acceso a futuras compras en la plataforma.
Las consecuencias negativas también son para la propia plataforma de ecommerce. Si el usuario recibe paquetes no solicitados, se perderá la confianza de los consumidores y comenzarán a cuestionarse aspectos básicos como la seguridad, los estándares de calidad y la transparencia de los vendedores en dichas plataformas. De este modo, se podrá disuadir a los compradores legítimos a realizar futuras transacciones, dañando la confianza del ecosistema del comercio electrónico desde el primer momento.
¿Cómo actuar si se es víctima del brushing?
El procedimiento es bien sencillo. Los expertos en ciberseguridad recomiendan rechazar cualquier paquete que no se hubiese solicitado y devolverlo al repartidor de manera inmediata. Incluso, si fuese necesario, habría que alertar a las autoridades locales competentes.
Plataformas, como es el caso de Amazon, ha actuado de manera inmediata y ha alertado a sus usuarios sobre las prácticas de brushing. De hecho, ha establecido políticas estrictas contra envíos no solicitados. Los usuarios podrán reportar cualquier paquete sospechoso por formularios específicos disponibles en sus páginas web.
Pese a los esfuerzos de las compañías más importantes, el fraude sigue en aumento y la creciente cantidad de datos personales que circulan por la red ponen en peligro la integridad de los usuarios. Siempre y cuando se mantenga una actitud proactiva, se podrá adoptar la mejor defensa frente a estas amenazas.
Los expertos en materia de ciberseguridad recomiendan, bajo cualquier concepto, monitorear de cerca las actividades en las cuentas de ecommerce. Es el único método para posibles fraudes, ya que estas técnicas engañosas pueden dañar la confianza en las propias plataformas y complicar las experiencias de compra de los usuarios legítimos.
De ahí la importancia de revisar las cuentas bancarias y de correo electrónico, proteger la información personal, mantener un contacto permanente con la plataforma ante movimientos sospechosos y cambiar las contraseñas si se sospecha que la información ha podido ser comprometida.
De nada servirá que aplicaciones como Amazon, Temu o Shein apliquen una tecnología avanzada para facilitar la experiencia de compra, con recomendaciones personalizadas y opciones de pago seguras, si luego no son capaces de evitar la moda del brushing. Precisamente la elevada flexibilidad hace que se eliminen los intermediarios, que se pueda comprar directamente a fabricantes y se reduzcan los costos. Pero también se corre el riesgo de ser víctimas de una estafa.
