El 19 de enero es la fecha marcada en rojo en el calendario estadounidense para que entre en vigor la ley bipartidista, firmada por Joe Biden en abril de 2024, que prohíbe el uso de TikTok en EEUU. La única forma de evitar su desaparición y, por ende, que más de 170 millones de usuarios se viesen afectados, es que la empresa matriz, ByteDance, venda sus operaciones a otra empresa. El mejor postor: Elon Musk.

La red social se ha llenado de vídeos y de mensajes reivindicativos de usuarios e influencers que se niegan a dejar de usarla o que se despiden ante el miedo de que ésta deje de estar disponible o de no contar con las actualizaciones necesarias. Incluso, hay quienes se toman con humor esta situación y aprovechan las últimas horas para ‘despedirse de su espía chino personal’.

Las próximas horas van a ser decisivas para saber si finalmente TikTok logra esquivar el veto en el territorio estadounidense. Las autoridades chinas se encuentran a la espera de que la Corte Suprema de EEUU resuelva la apelación interpuesta y ver si finalmente la ley queda ratificada.

¿Cuándo surgió la guerra contra TikTok?

Todo comenzó el 31 de julio de 2020, cuando Donald Trump anunció la prohibición de TikTok ante la preocupación de que la plataforma estuviese siendo utilizada por Pekín como instrumento de espionaje y persuasorio.

EEUU se mantenía preocupado por la influencia de China, su creciente dominio de la información y su gran avance en el sector tecnológico. En 2020, Trump intentó fomentar la desinversión sobre TikTok, aunque varios tribunales federales la cancelaron. En 2022 se prohibió la red social en dispositivos oficiales y en 2023 se creó el Comité Selecto sobre la Competencia Estratégica entre EEUU y el Partido Comunista Chino.

El texto legislativo prohíbe a la plataforma operar en el país si no se cumplen una serie de requisitos de seguridad nacional. Entre ellos, evitar la recopilación de datos de ciudadanos de EEUU por parte de las empresas chinas. Y es que hay leyes en el país asiático que permiten al Gobierno obligar a las organizaciones nacionales a recopilar información.

Otros países como Reino Unido, Noruega, Taiwán, Canadá e incluso el Parlamento Europeo y la OTAN prohibieron TikTok en dispositivos oficiales. Rusia la ha multado en varias ocasiones, Indonesia la ha restringido e India la prohibió en 2020.

Trump: la única esperanza de TikTok

Parece contradictorio que, precisamente la persona que inició la lucha contra TikTok, sea ahora quién pueda salvar a la red social. El nuevo presidente de EEUU se unió a la plataforma el 2 de junio de 2024, en plena campaña electoral. Ahora acumula más de 14,8 millones de seguidores, la mayoría jóvenes.

Trump se estaría planteando mantener TikTok, siempre y cuando ByteDance cediese y vendiese la empresa a otra compañía que no perteneciese a un país adversario de EEUU. Incluso, algunos expertos señalan que es posible que Apple y Google decidiesen no cumplir con la ley.

El republicano, apoyado por Elon Musk y consciente de que su victoria en las urnas se debe, en gran medida, a esta red social, vería con buenos ojos que el magnate se hiciese con el control de TikTok. No hay que olvidar que Jeff Yass, uno de los principales inversores de ByteDance, fue uno de los mayores donantes de los republicanos en campaña con hasta 47 millones de dólares.

Elon Musk se interesa en salvar a TikTok

Musk asegura que la nueva norma es contraria a la libertad de expresión. Si el CEO de TikTok, Shou Zi Chew aceptase la venta, se consagraría un negocio exitoso. Musk ya gastó más de 250 millones de dólares en apoyar la reelección de Trump y ahora estaría presionando al presidente por mantener, con controles, la red social. Y es que se estima que el valor del negocio de TikTok en el país oscila entre los 40.000 y los 50.000 millones de dólares.

El magnate, pese a las oposiciones del gobierno chino, es consciente de que con esta operación su red social X tomaría el control sobre TikTok USA y dirigirían ambos negocios. Se harían con los más de 170 millones de usuarios de la red social en EEUU y sería una fórmula para atraer anunciantes a X. Además, la empresa de IA de Musk se vería beneficiada por los datos generados en TikTok. Este acuerdo podría acabar con los excesivos controles y aranceles sobre China.

Ante todo esto, el Ejecutivo de China asegura que cuenta con una ‘acción de oro’ que le permite influir en las decisiones de la empresa. No obstante, TikTok alega que ese control es exclusivo para la filial china, y no en el negocio con EEUU.

La respuesta de los usuarios de TikTok en EEUU

Los usuarios han preferido tomarse con buen humor la posible prohibición de la aplicación. De ahí que se haya convertido en tendencia el hecho de despedirse de su espía chino personal’. Una fórmula que se burla de las preocupaciones de seguridad que giran en torno a la aplicación.

El ingenio no ha dejado de surgir. Una publicación llegó a acumular más de 1,5 millones de ‘Me gusta’. Mostraba una escena de la serie ‘El Juego del Calamar’ con el título “Me despedí de mi espía china el día 19 (perfeccionó mi algoritmo)”.  Hay quienes, incluso, se hacen pasar por espías que controlan los algoritmos individuales.

Hay quienes aseguran que seguirán en TikTok, pues prefieren compartir sus datos con el gobierno chino antes que cambiarse a Instagram Reels o a YouTube Shorts.

Lo que sucederá con TikTok en EEUU sigue siendo, hasta la fecha, una incógnita. Una oferta de Musk, un paso atrás de EEUU o una rectificación de China son escenarios que se contemplan en una red social que no para de crecer y de ganar popularidad.

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