El pasado 6 de abril saltaban las alarmas por una supuesta brecha de datos en la plataforma de LinkedIn. Un archivo con nombres completos, direcciones de email, teléfonos o puestos de trabajo de 500 millones de usuarios estaría vendiéndose en un conocido foro de piratas informáticos, según las investigaciones realizadas por Cybernews y que te contábamos aquí.
No quedaba claro, sin embargo, si la brecha podía deberse a un problema de seguridad anterior, si se estaban vendiendo datos de perfiles actualizados o si la infracción la pudieron sufrir otras empresas. El 9 de abril LinkedIn se pronuncia y niega que se trate de un hackeo.
“Hemos investigado un supuesto conjunto de datos de LinkedIn que se ha puesto a la venta y hemos determinado que en realidad se trata de una agregación de datos de varios sitios web y empresas”, explica la compañía en un breve comunicado. La versión oficial de la red social apunta, además, a que hay datos de perfiles públicos que parecen haber sido extraídos de LinkedIn. En cualquier caso, afirman, “no se incluyeron datos de cuentas de miembros privados”.
Italia y Hong Kong inician investigaciones
La versión oficial no ha convencido a algunos países, decididos a emprender investigaciones por su cuenta. Es el caso de Italia. Según las últimas actualizaciones de Cybernews la autoridad italiana habría pedido a los usuarios afectados que “presten especial atención a cualquier anomalía” relacionada con su teléfono o su cuenta.
Cybernews señala que un nuevo autor dice estar en posesión de la base de datos original y de otra de 327 millones. El total superaría el número de usuarios de LinkedIn, lo que hace pensar que los nuevos datos podrían estar duplicados o desactualizados.
Por otro lado, Cinco Días exponía en este artículo que gobiernos de distintos países lo están investigando. La Oficina del Comisionado de Privacidad de Datos Personales de Hong Kong recibió un aviso sobre la presunta filtración y ha enviado una carta pidiendo aclaraciones. La respuesta a esa solicitud se desconoce, pero lo que está claro es que la preocupación existe. Este medio contactó con LinkedIn para conocer más detalles, pero por el momento la compañía no hará más declaraciones al respecto.
