Este viernes el juez Santiago Pedraz ha ordenado el cierre temporal de la aplicación de mensajería Telegram en España por la denuncia interpuesta por Mediaset, Atresmedia y Movistar.
Para entender qué sucede, hemos de indicar que la denuncia indica que Telegram permite la difusión de material protegido por derechos de autor, y esto ha llevado a solicitar a la empresa con sede en Dubai y oficinas en Islas Vírgenes y Londres los datos de los usuarios que publican este tipo de contenido.
Ante la respuesta negativa de la compañía a los requerimientos del magistrado, se ha procedido a instar a todas las operadoras que brindan acceso a internet, que bloqueen Telegram usando todos los medios tecnológicos que sean necesarios para poderse llevar a cabo.
Estos medios incluyen las webs y URLs de Telegram como https://web.telegram.org, la aplicación de mensajería Telegram Messenger (https://telegram.org/ 2.2./), las apps para Android e iOS, así como bloquear la conexión (direcciones IP, protocolos, puertos y cualquier otro elemento de conexión).
Para llevar a cabo este tipo de bloqueo, debe de realizarse a gran escala.
Técnicamente no es complejo bloquear en los dispositivos de salida a internet todo lo que solicita el juzgado. Es sencillo y ya ocurre con otras webs en las que, cuando el usuario necesita acceder de forma habitual, tendrá un error 403 de la URL. Sin embargo, es bastante ineficaz porque podemos evitar este bloqueo de una forma sencilla sin ser expertos en tecnología.
Para poder saltarse este bloqueo, debemos utilizar de sistemas de proxy y VPN que anonimicen nuestra navegación, de esta forma los usuarios pueden acceder a la red sin ningún tipo de restricción y censura. Por lo tanto, es una medida que no va a impedir el acceso a la red.
Al necesitar el servicio de red privada virtual (VPN por sus siglas en inglés), tal vez se note cierta lentitud en los servicios de mensajería, pero en ningún caso, el tráfico podrá ser bloqueado.
Este tipo de bloqueo no es nuevo para Telegram ya que sucedió un caso similar en Brasil donde un juez ordenó el bloqueo temporal hasta que la compañía colaborase con las autoridades locales.
